Es un día muy caliente para Anthony Cruz. Está totalmente ansioso de polla y cuando Mathieu Ferhati llega y le pilla con la polla en la mano, masturbándose, sabe lo que el tío quiere. Su lado oscuro y dominante cobra vida. Le escupe, le adula la cara con su enorme polla y se la mete hasta la garganta para que se la chupe. Una vez que se ha hartado de follarle la cara, utiliza su lengua en el agujerito apretado de Anthony antes de tomar su culo liso para un largo y profundo paseo.