Estos 2 chicos gay de Londres están juntos desde hace un par de años. Al de abajo le encanta que le vean cuando se lo follan. Su novio hace realidad su mayor fantasía: ¡se lo follará para una marca de porno gay! Ahora el mundo podrá ver lo buen fondo que es y lo buen tope que es su novio, siempre complaciendo su culo sumiso.

Un joven militar se despierta y encuentra a su compañero acariciando su polla gay a su lado. Entiende que su compañero quiere que su polla gay sea adorada. El sexo con cara de gay y el sexo a pelo vienen con Nathan Hope como un top caliente. Para los amantes del porno gay militar. Es difícil ser sutil cuando te juntas con jóvenes calientes como Skikes y Nathan Hope. Después de unos ojos furtivos de carne de hombre, Skikes y Nathan ya no pueden esconderla, y Nathan toca su polla semi-dura sobre su camarada dormido pero no dormido, que rápidamente se la traga y la ayuda a llenarse en cuestión de segundos! Ya duro por su paja matutina, Skikes está de humor para una cogida de culo duro, lo que es perfecto ya que Nathan quiere exactamente lo mismo y no pierde tiempo en lubricarse y bombear al joven entintado. Los suaves y bonitos rasgos de Nathan trabajan su gran polla sin cortar en lo más profundo, su piel tatuada combina perfectamente con Skikes que lucha al principio por cogerlo todo, gritando mientras Nathan se empuja profundamente, su polla cruda caliente en su interior y con las piernas altas y separadas, Skikes no irá a ninguna parte hasta que Nathan suelte su carga, alimentando a Skikes directamente de su polla que no tiene ningún problema en lamerla limpia para él!

Para causar problemas, el joven irlandés Teaikes, Skikes está de vuelta tras las rejas con el oficial AJ de guardia encargado de vigilar a este matón irrespetuoso. Mientras su supervisor está allí, AJ es profesional y tranquilo, pero tan pronto como su jefe termina, ¡AJ se da vuelta y le dice al pequeño imbécil quién es realmente el jefe por aquí! Desbloqueando la celda y entrando, AJ ya es difícil de pensar a lo que va a someter a su prisionero, ¡y es muy difícil de ocultar! Esposado y tratado con una bocanada de polla dura sin cortar, Skikes no sabe si es un castigo o un placer, pero cuando su culo pronto es saqueado profundamente, ¡definitivamente es el placer! Aferrado a los barrotes de la celda, Skikes se toca fuerte y profundo, ¡y la oficina tatuada da lo mejor de sí para mostrarle lo que obtiene cuando capta su atención! El resultado es una boca llena de esperma de oficial y ¡ni siquiera su llamada telefónica legal!