Donnie Marco ha vuelto, y está cachondo, y como se acercan las Navidades le vamos a permitir que disfrute de una de sus fantasías personales, el sexo con zapatillas. A Donnie le encanta aspirar el penetrante y masculino olor de los pies de un hombre, cuanto más maduros mejor. Ted Glen va mucho al gimnasio, así que las zapatillas que envuelven la cara de Donnie están bien perfumadas. La gran polla sin cortar de Donnie está durísima y todos sabemos a dónde se dirige: a todos los orificios que Donnie pueda encontrar, y el joven Ted está más que ansioso por complacerle. Donnie ara sin piedad el maduro y dulce agujerito de Ted, a pelo, sin circuncidar, todo lo que os gusta a los tíos, ¡y estamos esperando cada gota de semen!